jueves, 19 de febrero de 2015

Autorretrato

Ayer me hice unos selfies. Hasta hace poco se llamaban autorretratos, aunque dice García-Alix: "El selfie no es un autorretrato. Es un ejercicio hecho con un móvil, sin intencionalidad. El autorretrato necesita más chicha". Intuyo que no es de estar muy cuerdo hacerse fotos todos los días, a todas horas, en cualquier lugar, y me sorprende ver a tanta gente haciéndolo y luego colgándolas en las redes sociales. Hay muchos artículos escritos sobre esta nueva neurosis y algunos los he guardado porque me parecieron análisis muy certeros de esta moda espeluznante que tiene que ver con la ansiedad, el miedo a envejecer, el miedo a olvidar. Pues yo me hice las fotos –con mi celular– con el fin de experimentar ligeramente la obsesión por la búsqueda del yo más cercano (es decir, más lejano) a la perfección. Así que pasé media hora alargando el brazo y buscando el ángulo ideal para sacar lo mejor de mi perfil. No fue fácil. Se marcaba en mi mirada y en cada una de las líneas de mi cara la tensión, las huellas de los años vividos, que son imborrables. Insistí en buscar algo bueno, un poco del sentido del humor –y la ironía– que está enterrado en el miedo, las indecisiones, el afán de perfección, y logré dar con algunas imágenes que ocultan parcialmente esas señales. Estas me las quedo, a ver qué descubro dentro de unos años. 

http://www.eltiempo.com/opinion/columnistas/selfies/15020957

http://tecnologia.elpais.com/tecnologia/2015/02/19/actualidad/1424369783_273159.html

http://www.elconfidencial.com/cultura/2014-08-01/alberto-garcia-alix-selfie-autorretrato-fotografia-circulo-bellas-artes_170907/